El trabajo ilegal o el trabajo en negro es trabajo que el empleador no declara ante las autoridades. Su jefe se arriesga a recibir una multa muy grande por ello. El empleado no obtiene derechos a una pensión por jubilación o un seguro de enfermedades. Si usted no cuenta con permiso de residencia legal, corre el riesgo de acabar en un centro de detención y ser expulsado del territorio belga después de una inspección en el lugar de trabajo.
Si tiene permiso de residencia legal y recibió una prestación (prestación por desempleo, prestación de ingresos mínimos, etc.), le pueden obligar a reembolsarla. Si no recibe ninguna prestación, puede recibir una multa de entre 80 € y 800 €. Existen excepciones. Lea más aquí.